PROYECTO DE DECLARACIÓN
La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires declara de interés para la Promoción de los Derechos de las mujeres, géneros y diversidades de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a la Red de Géneros y Diversidad de Ciudad Oculta, Villa 15, Lugano comuna 8 – CABA por contribuir a la promoción de articulaciones comunitarias de prevención, visibilización y acompañamiento de las problemáticas relacionadas al género y la diversidad en los barrios populares.
FUNDAMENTOS
La Red de Géneros y Diversidad de Ciudad Oculta nace en marzo del año 2019, cuando un grupo de compañeras y vecinas, se convocaron para pensar una actividad en el marco del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que fuese en el barrio en donde viven y/o militan. Se reunieron por primera vez, alrededor de diez personas, en la casa de una compañera del barrio. Iniciaron una ronda, en la que se presentaron y comenzaron a pensar qué querían hacer, cómo y con qué contaban. Pusieron en discusión cómo se viven los 8 de marzo en el barrio. La primera iniciativa y acción conjunta fue un partido de fútbol feminista en una cancha pequeña al lado de uno de los comedores barriales.
En aquel domingo lluvioso y furioso, que no les impidió reivindicar el paro internacional de mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binarios, alrededor de una pelota, música e intervenciones artísticas, comenzó a gestarse esta red. Esta posibilidad, en la que juntas, pueden intervenir el barrio, transformarlo, visibilizando las violencias que a diario atravesamos las mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binarios.
Se dieron cuenta que juntas y en unidad, podían hacer muchas más cosas y que era necesario hacer correr la voz, invitar a más vecinas y a otras organizaciones que militan en el barrio a construir en conjunto.
Así fue que comenzaron a reunirse periódicamente, sumándose cada vez más compañeras. Fueron varias las propuestas y preguntas que emergieron en torno a la red que se iba gestando: un nombre, un logo, una bandera, qué quieren, qué esperan, qué necesitan, qué les gustaría, cuál es el objetivo, para quiénes, por quiénes y cómo.
Al poco tiempo transcurrido del año 2020 la pandemia atravesó y golpeó de una forma brutal al territorio. No es casual que durante ese tiempo, la red se consolidó como tal. La pandemia puso en evidencia e incrementó las violencias que generan las diversas desigualdades sociales que atraviesan las vecinas del barrio. Las mujeres, las personas lgbtqi+ y las infancias son quienes más sufrieron las consecuencias. Ante las emergencias y la incertidumbre social, la red se convirtió en un espacio muy importante en el que se encontraron para intercambiar experiencias y buscar estrategias de manera articulada para acompañar situaciones de violencias, sostenerse y darse fuerzas.
Actualmente la red está compuesta por más de 70 compañeras de 17 organizaciones políticas, de distintas asociaciones civiles, vecinas, compañeras profesionales del Cesac 28, promotoras de género y diversidad y operadoras sociocomunitarias.
Es una red íntegramente diversa: quienes participan tienen entre 16 a 60 años de edad, hay personas migrantes, mujeres, lesbianas, travestis, trans, no binarios. De distintos recorridos políticos y trayectorias de vida. Promueve formas de organización horizontal, democrática, constructora de nuevos sentidos y, sobre todo, desde la amorosidad.
Es por ello que creemos necesario sostener y fortalecer redes como ésta, con el objetivo político de llevar adelante la unidad, desde un compromiso inmerso y desde la perspectiva del feminismo popular. Donde se puedan seguir construyendo espacios de integración, deconstrucción y reconstrucción de ideas y saberes compartidos y debatidos en el espacio.
Retomando sus inicios, uno de los objetivos que movilizó su creación está fuertemente arraigado a la posibilidad de construir vidas libres, felices, plenas y dignas para las mujeres y LGBTI+. La lucha contra las violencias machistas es el reclamo que desencadena la necesidad de juntarse. Violencias que forman parte de la vida cotidiana de las compañeras de los barrios, las cuales se agravan y agudizan ante la migración, la racialización, el ser villera, el desempleo y la pobreza. Estas intersecciones quedan evidenciadas en el encuentro, cuando juntas las ponemos en palabras y pensamos medidas para reclamar por las desigualdades que se generan. La red es un gran espacio de reflexión, en el que se comparten y socializan los saberes populares, ancestrales y comunitarios. Desde los diversos recorridos y visiones del mundo, entre las preguntas y respuestas que nos vamos dando, la red es un espacio en el que no solo se socializan saberes sino que se produce conocimiento.
Es un espacio de visibilización de las problemáticas territoriales. La potencia de cada encuentro también tiene que ver con que van registrando y evidenciando las demandas del barrio en primera persona, como también siendo protagonistas de los acontecimientos sociales, y siendo visibles en el escenario público.
Es así que desde La Red se inició y promovió la primer caravana feminista de Ciudad Oculta (Villa 15), la cual sucedió en el marco de lo que hubiera sido el encuentro plurinacional de mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binarios en San Luis, en octubre del 2020. Esta acción, fue para el territorio un hecho disruptivo y visibilizador, que puso de manifiesto y en escena la conformación de un colectivo consolidado que se tiene, se mira y se reconoce. Y que en medio de una pandemia, dejó en evidencia que mujeres y las personas LGBTI+ se encuentran en situaciones de violencia machista, conviviendo con sus agresores sin posibilidad de moverse de allí, estar gritando en los pasillos “si te grita no te quiere, si te pega no te quiere” resultaba un acto de un valor inmensurable. Esta consolidación, en un año donde la emergencia se hacía carne, dejó en evidencia que nadie se salva solo.
Es fundamental reconocer el valor que tiene para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la construcción de redes territoriales, como agente estratégico a la hora de prevenir y erradicar las violencias por motivos de género y pensar estrategias comunitarias para crear y construir otras posibilidades. Así como también es menester valorar el inmenso trabajo de acompañamiento y sostén que la red es para las vecinas y vecinos de Villa 15 y alrededores.
Es por todo lo expuesto, que solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto de Declaración.
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